Ambas formaciones saltaron a la cancha con ropa de entrenamiento. Camiseta azul con el número estampado en el frontal los alcalaínos y, los zamoranos, con la roja que habitualmente usan en sus entrenamientos y calentamientos. Al mando del encuentro, un único árbitro que no encontró dificultades reseñables para conducir un partido de dos partes de 30 minutos cada una a tiempo corrido. Bastó. Pocas interrupciones y un tiempo efectivo de juego dentro de los límites razonables para este coaching entre aspirantes al título y los que anhelan la permanencia.
[La narración se realiza en cuenta atrás, de acuerdo con el marcador].
Llegó el FS Zamora con toda su plantilla (excepto Israel) a Alcalá. Pipe, Pavesio, Sergio, Gus y Jurado realizaron carrera continua alrededor del perímetro de la pista mientras sus compañeros calentaban antes de ponerse al juego. Estos cinco no saltaron en ningún momento a la cancha debido a las distintas dolencias físicas que arrastran (excepto Jurado). Sin embargo, todo hace indicar que estarán dispuestos para el encuentro contra Torrejón del día 6.
El cinco inicial tan sólo conoció una modificación respecto al presentado ante el equipo pamplonica unos días atrás. Ésta se dio en la posición de cierre en la que Rogério Vilela entró por Contreras.
Por parte local, el cinco que presentó Candelas fue el siguiente: Jesús en portería, Neto, Schumaquer, Marquinho y Betao.
El partido comenzó con el Ínter probando fortuna, con Marquinho al disparo, aunque seguidamente recibiría la réplica de un inspirado Justo Cáceres en tiro exterior cruzado usando el recurso de la puntera que se fue por el poste izquierdo de la portería defendida (otra vez) por Jesús.
Después de este ataque del FSZ, el Ínter se volcó sobre la portería de Arrivi, al que puso a prueba en distintas ocasiones y de las más diversas maneras entre los minutos 24 y 20. Primero Schumaquer probaba su fuerte disparo desde el exterior, llegado por banda derecha al que respondió de un modo soberbio el nuevo guardameta. Apenas un minuto después se repetía la acción con los mismos personajes e idéntico resultado aunque esta vez el "proceso" fue mucho más bello, adornandose el cancerbero zamorano con una estirada para enmarcar.
0-1. Entre Marcelo y Betao.
En el 21' llegaba el gol visitante. Betao introduce en portería propia un disparo fuerte, aunque con pocas posibilidades de gol de Marcelo que, escorado a la derecha del marco probó a sembrar y recogió.
Tras el gol, el FS Zamora gozó de tres nuevas oportunidades. La primera, a 30 segundos de que el gol subiera al marcador, entre Serrano y Marcelo. La segunda, entre Serrano y Contreras en la que el capitán zamorano, mediante un largo pase diagonal y raso desde la banda derecha no encontró -por centímetros- la pierna de José Contreras que llegaba en carrera por la banda opuesta ganándole espalda y posición a su marcador. La tercera y última de este arreón de los zamoranos fue una contra entre Cáceres y Serrano. El talaverano robó y se la ofreció larga al "capi" en una jugada que quiso recordar a los presentes uno de los goles que ya anotara el FSZ en este mismo escenario tiempo atrás.
La reacción de la "máquina verde" no se hizo esperar y, hasta que sonó la bocina el partido se convirtió en un asedio de 12 minutos sobre la mitad de pista rojiblanca.
En el 15', Javi Serrano saca un balón sobre la línea de gol cuando cubría una salida del guardameta.
Cuatro minutos despúes Betao se ofrece tras las líneas zamoranas, al borde del área de Arrivi, a un balón largo y bombeado procedente del último cuarto de pista local. El expeditivo meta zamorano no espera a que pueda recibir el brasileño y hace bien. Sale de cabeza y despeja sobre un estático Betao que buscaba acomodarla con el pecho y, que posteriormente, reclamaría al árbitro por esta acción.
1-1. La Máquina sí estaba engrasada.
A falta de tres minutos para el descanso Ínter obraba el empate en una jugada de alto nivlel en la que sus cuatro jugadores de pista tocaron el esférico. Marquinho pasa el balón a campo zamorano subiendo la banda derecha, combina cruzado con Neto que hacia lo propio por la izquierda. Este, de pase adelantado, facilita un balón en la misma frontera del área que Betao clava con una proyección verticalísima contra el travesaño posterior de la portería. Difícil de parar esa jugada, imposible de parar el disparo.
2-1. No se hizo esperar.
Con la reanudación no hubo tiempo para conjeturas. El Ínter mostró su eficacia rápidamente. Sólo necesitó 22 segundos para hacer el segundo que, de nuevo, surgía de los pies de Betao quien, a la media vuelta, se zafó de su defensor con un reverso dentro-fuera en el borde curvo del área para batir a Arrivi por el palo largo.
A partir de este momento el FS Zamora volvió a la carga, se hizo con el balón, que hizo circular con bastante agilidad aunque con poca profundidad ante la bien plantada defensa alcalaína. Ante esto, los zamoranos optaron por el tiro exterior y fuerte. Primero Cáceres y en la siguiente jugada Vilela a la salida de un córner cargaron la pierna.
Estas intenciones se prolongaron del minuto 22 al 17 en el que Justo y Marcelo posteriormente volviern a emplear el recurso de la puntera con bastante tino pero el portero local estuvo a la altura de las exigencias, tanto exteriores como en los uno contra uno, "suerte" en la que en más de una ocasión se vio las caras con Marcelo y de las que salió airoso.
3-1. Neto de falta.
A falta de cinco minutos llegó el tercero de Interviú. Falta a algo menos de dos metros sobre el punto de penalti, más o menos centrada en la que Javier Arrivi se coloca a la derecha de la barrera y es batido por su palo. Única mácula en el partido del recién fichado que supo contrarrestar el asedio al que, en todas sus formas, al equipo local sometió sometió al marco que defendía.
Rogério Vilela, uno más en el equipo.
Pese a ser su primer encuentro la conexión Vilela-Cáceres-Marcelo funcionó de modo satisfactorio. Probó varias veces su disparo exterior al que le caracteriza una potencia que se verá beneficiada por el consumo de balones Penalty en esta segunda vuelta por parte de la LNFS. En los córners que se botan en ataque, sobre todo en la cornisa izquierda se deja caer escorado hacia el carril derecho un metro a la izquierda del poste, a media cancha y busca el cambio de juego por aire. Don con el que ya le hemos visto perforar redes en su paso por el SL Benfica.
Justo Cáceres, liderazgo.
Pese a ser una incorporación reciente, pese a lo que se había leído en algunos foros de fútsal sobre su fichaje diciendo que era un jugador con "el agua pasada" ha demostrado ser un referente sobre la cancha tanto en defensa como en ataque. Ha probado los reflejos de Jesús en más de una ocasión y con excelsa exigencia. Rápido y decidido. Una vez más, la afición zamorana podremos comprobar que los años lejos de restar, aportan galones. Bienvenido seas.
Contreras, sobresaliente.
Volvía al escenario de uno de los mejores partidos que le recuerdo con la camiseta zamorana y cumplió con los estándares que se podrían esperar de forma habitual de este jugador e, incluso, con carácter excepcional. No se achantó en ningún momento ante la velocidad (poco reluciente hoy) del combinado complutense y supo esperar al momento preciso para meter el pie o irse al suelo cuando el corpulento Betao pisaba y disparaba. Recibió un golpe en el rostro en un lance del juego pero no fue a más afortunadamente. Durante el encuentro, no se pudo apreciar momento alguno de flaqueza después de los problemas que sufrió ante el Xota. Robó a medio campo cortando la contra y facilitando segundas jugadas. ¿Cancha motivadora?
Carracedo, rotación y algo más.
Muchos le han crucificado antes de verle jugar por su equipo de procedencia: el Carballiño FS de Primera Nacional. Sin embargo, en el día de hoy, ha demostrado haberse ganado a pulso la confianza una dirección técnica que después de someterlo a prueba en el parón invernal le ha fichado hasta final de temporada. En más de una ocasión se ha ofrecido en situación provechosa en la frontal del área con opcion a recibir, incluso a tiro franco. Quizá le hayan faltado balones de sus compañeros para demostrar un poco más sus habilidades. Predisposición, no obstante, su carta de presentación.
(Destaco a estos jugadores porque sobreentiendo que, en un partido como el de hoy, son los que más curiosidad han generado).
En las gradas, poco más de una decena de espectadores. Un par de supuestos ojeadores del Torrejón Carnicer se dejaron caer por el pabellón cámara en mano.
